Cosas de un bloguero.

Es difícil a veces decir algo interesante en el blog, que pueda servir para algo, al que nos lee o visita. Las imágenes a veces dicen más que lo escrito, pero lo que sí es verdad que siempre hay algo dentro. Está de moda ser bloguero, pero sinceramente para ser honesto, diré que es una ardua tarea. El no aburrir al visitante, arrancarle un comentario, o un me gusta, es un premio excelente que ayuda a seguir andando. Sin embargo, el arte de la escritura, por lo menos para mí, es una medicina que me endulza el ánimo. Entiendo modestamente, que este arte no es algo especial en mí persona, sobre todo cuando uno navega a su aire y lee a auténticos poetas, que no cito porque estoy seguro que a ellos incluso los importunaría, también a escritores, o a científicos que nos enseñan algo a diario siempre sin interés alguno.
El ser mágico en algunas artes no es solo el público reconocimiento, es quizá a mi modesto parecer sentirse mago por dentro, el saber que dices algo a los demás. Podemos abrir al día siguiente o por la noche lo escrito el día antes y veremos defectos o faltas, pero no hay duda que quisimos decir algo. El llenar estos folios nos permite comunicarnos en el anonimato. Y sin prácticamente enterarnos observamos que somos bastante para muchas personas.
Mantuve amistad con una persona que postrada en su lecho escribía una muy bella poesía, su huella me quedó muy dentro y aún hoy día me emociono cuando la recuerdo, lamentablemente aquel blog lo perdí debido a unas circunstancias difíciles en aquel momento para mí, pero su recuerdo me marcó para siempre.
Creo que aprendí y aprendo cada día cosas distintas gracias a participar en este dueto que formamos los que plasmamos nuestras ideas y los que nos leen.
Ahora solo me queda decir esa frase tan bonita y en mi caso también sincera.
¡Gracias por venir!

Photo credit: rubatacchini / Foter.com / CC BY-NC-ND

Efe.