Zapping.
El otro día zapeaba desconsoladamente, intentando encontrar algo que me entretuviese, cuando di con un programa nuevo en un canal de difusión nacional. Se trataba a groso modo de reunir en torno a una cena deliciosa, a dos personas. Sociológicamente tenía su miga la cosa y aunque está bastante usado el argumento, consiguieron que me quedase unos minutos.
Se desarrolló entre varias parejas, incluso una pareja gay que me hizo sonreír y hasta me dieron ganas de gritar.
¡Bravo por vosotros!
Pero mi entretenimiento se acabó, cuando tocó otra secuencia, en la que un troglodita, argumentaba ante la confesión de la deliciosa mujer que le había caído en suerte. Esta que era una bloguera de éxito por cierto, le comentaba que ella mantenía y escribía en un blog sobre sexo. Ante semejante supuesta atrocidad el varón airado la llamó de todo menos bonita. Que por cierto este que la estaba viendo, da fe de que era súper atractiva.
El enfadado macho ibérico, después de manifestarla que era bastante sabio terminó, tirándose al ruedo, para afearla su dudosa conducta como mujer casta, ya que según su docto parecer esto era cosa de salidos mentales, pero eso si muy machos.
Bueno no fue la frase exacta, pero si aproximada la salida de tono del galán.
Este, me pareció insufrible y solo se salvo la hembra bandera que capeo el temporal genialmente, para dejarle mental y moralmente en bragas, al susodicho pretendiente, como se diría coloquialmente en mi barrio.
Después ya no seguí con el zapping simplemente apagué el televisor.
efe.
Photo Credit: Christyan Martos via Compfight cc