Photo Credit: Jotha Garcia via Compfight cc
Amores que matan.
Hoy me apetece ver los colores de la Primavera y ojalá que estos inunden la vida de todos los seres Humanos, pero quizá, haya que contar otras cosas.
De niños los casaron, la pobreza familiar fue su patrimonio y para heredar su miseria tiempo tuvieron. Su hembra era el trofeo ganado en una cruel y triste conquista. Las lágrimas lavaron las penas de ella y el malgastó sus sonrisas en celos infundados.
Los hijos del drama, a su madurez huyeron, cosechando en buena parte su fracaso. Reponerse difícil le has resultado, pero dese luego la tristeza tampoco les ha faltado.
Su hombre a su mujer posee, machista y equivocado, de cualquier otro congénere la defiende, la adora pero la maltrata, la mima pero la desespera, la secuestra y la viola, pero lo más cruel es que de la libertad la priva.
La justicia poco puede hacer, si el miedo a la mujer la encadena, su tradicional familia esta unión bendice y la creencia de que la mujer con la pata quebrada en casa, es lo decente, a este monstruo lo ampara.
Así desgraciadamente la vida para muchas mujeres pasa. La Sociedad la salud emocional no vigila y al final la sangre da por terminada esa mala forma de vida.
Desgraciadamente esta historia está basada en hechos reales y ante el estupor de todos nosotros todos los días nos desayunamos con estas terribles historias, pero la realidad machaconamente se repite.
efe.